Toda tensión en el trabajo nace de una sensación de agobio . Muchas pueden ser las causas, pero una de ellas, quizás la más acuciante es tener un lugar de currelo inapropiado, tercermundista e irreal como el lugar de atención al público de la foto, ubicado en una escuela, sin calefacción, sucio, sin nadie que lo limpie, y lo más acuciante... la presión de verse solo, limitado a un horario laboral corto donde tienes además que atender al público en un tiempo irreal, junto con una zona de reparto que excede con mucho el horario de tu contrato laboral es mucha, y transciende tu horario laboral, llevándote para casa la amargura.
Señores, señoras, el escenario del crimen está servido!!
La víctima se le supone, uno de nosotros.
Los acosadores por partida doble: el público incorrecto y desde Santiago o Coruña los jefecillos y viajeros toma-notas.
Y las ideas que te meten en la cabeza tanto los usuarios como los enviados de los jerifaltes también son delicadas: "El otro contratado lo sacaba todo y todo estaba al día"
Con menganito nunca tuvimos un problema... La otra era como de la familia... no tienes ni idea... si no sabes , vete a otro sitio... y otras lindezas.
Y lo peor, que tienes que afrontar ese mundo sol@!!!
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